A 10 días de haber lanzado el Bitcoin, ¿cómo le va a El Salvador?
Entre anuncios presidenciales, protestas, quemas de cajeros automáticos, denuncias e incertidumbre, es cómo han transcurrido los primeros 10 días desde que el Gobierno de El Salvador adoptó legalmente al Bitcoin como moneda oficial.
En el marco de la conmemoración del bicentenario del Día de la Independencia de El Salvador, el presidente Nayib Bukele continuó haciendo anuncios importantes en su búsqueda por seguir consolidando a las criptomonedas como nueva moneda nacional.
A través de su cuenta de Twitter, el mandatario indicó que, desde el pasado 7 de septiembre a la fecha, han sido abiertas más de medio millón de cuentas en la billetera electrónica “Chivo Wallet”, que permite a los salvadoreños realizar desde su celular transacciones de Bitcoin.
Por medio de la aplicación los usuarios pueden realizar compras o ventas con criptomonedas, y la apertura de cada cuenta viene con el equivalente a 30 dólares de regalo en Bitcoin.
El presidente Nayib Bukele precisó la instalación de 200 nuevos cajeros automáticos en distintos puntos del país, además de otros 50 cajeros que fueron habilitados en las ciudades estadounidenses de San Francisco, El Doral, Atlanta, Chicago, Dallas, El Paso, Houston, Laredo y McAllen.
El Gobierno anunció el funcionamiento del 95% de la billetera electrónica, a través de la cual, los 3 millones de salvadoreños que radican en el extranjero también pueden utilizar y enviar sus remesas a sus familias.
De acuerdo con el país centroamericano, el envío de dinero desde el extranjero es un importante motor para su economía debido a que equivale al 22% del Producto Interno Bruto (PIB).
Ante todo esto, el Gobierno que encabeza Nayib Bukele espera que el uso de Bitcoin contribuya a la bancarización de la población y capte los más de 400 millones de dólares de comisiones por las remesas que llegan desde el exterior.
El Bitcoin y sus obstáculos en El Salvador
A pesar de que el presidente Nayib Bukele ha encabezado una importante campaña en torno al Bitcoin, aún existe un importante sector de la población que se niega a utilizar las criptomonedas, quienes que han salido a manifestarse a las calles en el marco de la conmemoración del bicentenario del Día de la Independencia.
El pasado 15 de septiembre una multitudinaria protesta conformada por más de 15 mil personas, según datos del medio digital El Faro, salieron a las calles a manifestarse en contra de Nayib Bukele y su Gobierno.
En los 27 meses de gestión como presidente, ésta ha sido la manifestación más grande a la que Bukele se ha tenido que enfrentar, quien según los sondeos internos aún goza con el respaldo del 84% de la población, además de que 7 de cada 10 salvadoreños dijo estár de acuerdo con el uso de la criptomoneda pero prefieren el dólar.
La manifestación convocó a familias, jueces, médicos, veteranos de guerra, estudiantes, grupos feministas, entre otros.
Aunque no se reportaron hechos violentos, cerca del mediodía un cajero Chivo Wallet fue incendiado en la plaza Gerardo Barrios del centro capitalino, esto a pesar de que varios manifestantes trataron de que no ocurriera.
Algunos mercados del país continúan rechazando el uso de las criptomonedas, prefiriendo la utilización del dólar para realizar ventas y compras.
Investigaciones e Incertidumbre en torno al Bitcoin en El Salvador
De acuerdo acuerdo con información revelada por la agencia Reuters, la Corte de Cuentas de la República (CCR) de El Salvador, investigará una denuncia acerca de la compra de criptomonedas por parte del Gobierno y la construcción de los quioscos que albergan los cajeros automáticos de la red Chivo, todo esto por medio de un fideicomiso de 150 millones de dólares.
Dicha denuncia fue recibida por el tribunal el pasado 10 de septiembre, la cual fue hecha por la organización regional de derechos humanos y transparencia: Cristosal.
La denuncia involucra a seis miembros de la Junta Directiva del Fideicomiso Bitcoin, integrada por miembros de los ministerios de Hacienda y Economía y de la Secretaría de Comercio e Inversiones.
Por su parte, la agencia calificadora Standard & Poor’s Financial Services LLC (S&P), emitió un reporte, el pasado 16 de septiembre, advirtiendo las implicaciones negativas inmediatas que está teniendo El Salvador para su calificación crediticia.
Según la agencia los principales riesgos son que podría amenazar sus esperanzas de asegurar un programa de apoyo con el Fondo Monetario Internacional, aunado a que podría aumentar sus vulnerabilidades fiscales y dañar los bancos mediante la creación de desajustes monetarios cuando contribuyen los préstamos.
Asimismo, este jueves, se dio a conocer que los diferenciales de los bonos de El Salvador a los bonos del Tesoro de Estados Unidos alcanzaron un máximo histórico debido a los crecientes temores de los inversores de que el país centroamericano no alcance un posible acuerdo de préstamo con el FMI.