A través de la digitalización de un modelo educativo para pacientes y cuidadores en temas de diabetes tipo 1, se pretende empoderar a la población ante esta epidemia.
Las cifras de población afectada por diabetes son inciertas en nuestro territorio. Si bien en 2018 se cuantificó que el 10.3% de la población, unas ocho millones 600 mil personas reportaron que tenían la enfermedad, a partir de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2018 publicada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), no se cuenta con una cifra oficial de la población afectada por diabetes tipo 1. Un paciente con diabetes puede gastar entre 2 mil y 6 mil pesos al mes en su tratamiento médico, si no cuenta con seguridad social; además cabe señalar que este costo incrementó hasta en 20% durante la pandemia del 2020, pues la materia prima se vio restringida y se encareció el producto, de acuerdo con Juvenal Becerra, presidente de la Unión Nacional de Empresarios de Farmacias (UNEFARM), en entrevista para Milenio.
La transformación digital de un modelo probado
Ante esta perspectiva de salud en México, PAANDA, Programa de Atención para Personas con Diabetes tipo 1, ha iniciado su transformación de un modelo más tradicional, al de una startup dentro de la categoría healthtech, que ofrezca educación en salud en diabetes y gestión de datos biomédicos. En entrevista exclusiva con Techla, Ricardo Mondragón, socio y co-fundador de PAANDA, indica que el concepto actual es transformarse en una plataforma digital de educación en diabetes basada en evidencia, con miras a funcionar como una herramienta post-diagnóstico inspirada en el modelo de atención multidisciplinario creado en 2014 por el Dr. Fernando Ramírez. Dicho modelo de apoyo a pacientes con diabetes tipo 1 se empezó a aplicar en una de las clínicas públicas especializadas en atención a diabetes de la CDMX, ubicada en Casco de Santo Tomas, frente a la Escuela Superior de Medicina, por medio de la integración de 12 áreas de la salud.
En 2017 y 2018 se comenzó a trabajar en la digitalización del modelo para tener más alcance, a partir de la integración de Mondragón en el proyecto. El objetivo principal de dicha transformación es que el paciente y sus cuidadores vayan generando competencias de autocuidado que ayuden a la toma de decisiones diarias, y en caso de emergencia. Esta solución se ofrece como una alternativa ante la problemática de la epidemia actual de diabetes en México, especialmente en atención a diabetes tipo 1, que aparece más frecuentemente en niños y adolescentes. Con esta herramienta de educación y autocuidado se impulsaría el empoderamiento del paciente para afrontar con responsabilidad y conocimiento la enfermedad.
Solucionar una problemática experimentada personalmente
Mondragón encontró esta solución a partir de enfrentarse al problema de desconocimiento en temas de salud, luego que una de sus hijas desarrollara diabetes tipo 1 a muy temprana edad. El emprendedor encontró que no hay protocolos de atención para este tipo de diagnósticos, además de enfrentarse a un desconocimiento de los síntomas pre-diagnóstico, y un ambiente general de mala asesoría al enfrentarse al problema de forma repentina. El especialista en tecnología y negocios señala que se encontró incluso con contradicciones en las instrucciones a causa de los diferentes equipos de atención con los que trató al conocer el diagnóstico de su hija. Este tipo de situaciones “genera desinformación, ocasiona que los pacientes o los usuarios busquen información que es muy dispersa en muchos lados”, además del fuerte impacto en la economía familiar.
Por medio de la alianza con el Dr. Ramírez, su ahora socio en PAANDA, Mondragón buscó “estructurar lo que ya existe, que se tiene evidencia que funciona y que sabemos que funciona, lo que tiene el respaldo de asociaciones médicas y civiles que trabajan en estos segmentos de la población”. Dicha alianza se consolidó tras varias visitas a hospitales públicos y privados, en los cuales, por recomendación, Mondragón conoció el modelo de PAANDA. El contacto cercano y las explicaciones a nivel del paciente, sin regaños y con sentido humano, le llevaron a buscar cómo aplicar sus 9 años de experiencia en desarrollo de software para hacer una propuesta de creación de una plataforma digital a partir del modelo ya existente creado por Ramírez.
Innovación digital para un problema de salud pública
La implementación de este producto se plantea para atender a los afectados por la diabetes tipo 1, tanto pacientes como cuidadores, sin importar su nivel adquisitivo. Los emprendedores buscan sobre todo “generar estas competencias de autocuidado entre los usuarios”, según palabras de Mondragón. Actualmente PAANDA se encuentra en proceso de construcción de su modelo de negocio, basado en el conocimiento del mercado y sus necesidades, contemplando como usuarios finales a pacientes y cuidadores, con acceso gratuito, por medio de un examen diagnóstico de conocimiento, para pasar al programa de educación con base en sus necesidades. A la par, se proyectan como clientes potenciales a organismos y empresas proveedoras de servicios y productos de salud, farmacéuticas, aseguradoras, hospitales públicos y privados, laboratorios o comercializadoras de dispositivos médicos, quienes podrán acceder a generación de contenidos on demand, como medio de publicidad no invasiva en la plataforma. Aunado a ello, se contempla también la creación de expedientes clínicos digitales especializados en diabetes para dar un seguimiento adecuado de los pacientes.
El equipo de PAANDA, integrado por el Dr. Ramírez y Ricardo Mondragón, además de un grupo de colaboradores para la creación de contenidos, con apoyo de especialistas en áreas de la salud, tiene como planes a futuro la construcción de un prototipo funcional para pruebas con usuarios reales, a partir del conocimiento adquirido en las pruebas piloto y los años de experiencia del modelo en modalidad tradicional. Para lograr dichos objetivos, el modelo de negocio se abrirá a la inversión de capital externo, pues hasta ahora se ha hecho desarrollo, investigación de mercado, diseño de prototipo y lanzamiento exclusivamente por medio de bootstraping. El impulso por la crisis sanitaria de temas de salud también ha ayudado a generar interés en esta nueva herramienta, lo que abre la posibilidad de seguimiento al contacto previo con inversionistas y fondos, para consolidar el producto.
