La healthtech Medu quiere revivir el amor por aprender en los profesionales de la salud latinoamericanos
«Aquí todos nos consideramos bichos extraños». Sebastián Prida, médico de profesión, sabe que para innovar en una industria que se remonta a los orígenes de la civilización debe pensar fuera de la caja.
Después de trabajar en el sector healthtech en una startup Californiana de innovación tecnológica para hospitales en, Sebastián, con una idea clara de lo que quería hacer, en octubre de 2020, junto a sus socios, el médico Sebastián Salazar, el cineasta Santiago Pérez y el desarrollador Mauricio Peón deciden lanzar Medu, una plataforma de educación para los profesionales de la salud con contenido en español.
«El conocimiento salva vidas» comenta Sebastián Prida en una plática con Techla. «En el contexto de la pandemia nos dimos cuenta de que hoy más que nunca es muy importante tener actualizados a los profesionales de la salud».
Los socios de Medu detectaron que, si bien existe contenido educativo de calidad para médicos, este generalmente está mal presentado, lo que desincentiva a la comunidad a consumirlo. «No es interesante, ni cautivador. Queremos que los médicos se vuelvan a enamorar de aprender sobre medicina».
Otro problema que detectaron fue la falta de accesibilidad; si bien un sector de médicos es bien remunerado, hay toda una población de profesionales de la salud que no cuentan con los recursos necesarios para acceder a contenido de actualización de calidad.
Medicina, Arte y Tecnología
La plataforma de Medu busca cubrir estas áreas de oportunidad explorando diferentes formas de transmitir el conocimiento a través de tres pilares importantes: Medicina, Arte y Tecnología.
El primer curso que lanzaron fue sobre el manejo de pacientes con COVID, el cual tuvo un éxito rotundo. Después comenzaron a filmar procedimientos quirúrgicos con la idea de replicar el Anfiteatro de Benedetti en el siglo XXI. De esta manera, los usuarios pueden ver a través de sus pantallas, un trasplante de corazón filmado con el ojo de un cineasta que mostrará a detalle y de una forma cautivadora el procedimiento.
También realizan transmisiones en vivo. De esta manera los estudiantes pueden entrar al quirófano con el cirujano en tiempo real y hacer preguntas sobre el proceso. Otra vertical de contenido es la innovación, en donde a través de pláticas en un modelo parecido al de TED Talks, los usuarios pueden acceder a contenido que probablemente no aprenderían en la carrera. Ahí pueden aprender sobre Medicina Espacial de la mano de un experto que ha trabajado con la NASA o sobre Medicina Automotriz con la directora médica del Gran Premio de la F1 en México.
«Tendemos a separar el tema de arte y ciencia, cuando van de la mano. La medicina es mucho más arte de lo que yo creía.» Comenta Sebastián al referirse al alto estándar de calidad audiovisual que ofrece la plataforma.
Hoy en día, Medu cuenta con 100,000 profesionales de la salud registrados en su plataforma que acceden a materiales divididos en tres grandes pilares de contenidos: Educación Clínica, Educación Quirúrgica y Educación en Innovación.
Además, la healthech ha desarrollado proyectos de filmaciones en el Hospital John Hopkins de Estados Unidos, en el hospital de la Universidad de Texas en San Antonio o en Canadá con el reconocido cardiólogo Salim Yusuf.
Lo que sigue para Medu
«Ya tenemos alta calidad científica, alta producción audiovisual y gráfica. Ahora queremos ver cómo aumentar el engagement del usuario» reflexiona Sebastián Prida sobre los siguientes pasos de Medu.
A mitades de este año, la startup lanzó una interfaz interactiva sobre los videos de la plataforma. Este concepto y desarrollo original añade una capa sobre el video educativo para que los usuarios puedan interactuar con él. De esta manera, el cirujano puede realizar preguntas y el estudiante puede contestarlas. También pueden consultar información en flashcards mientras el doctor habla en pantalla, mismas que se pueden ir guardando en un cuaderno de notas virtual.
Otro formato que Medu ha explotado es el podcast. Por el momento cuentan con tres verticales: Helix en colaboración con la AMIIF enfocado en la investigación médica; Segunda Opinión, enfocado en la innovación en la parte clínica; y Cúspide, una serie enfocada en odontología. Actualmente se encuentran desarrollando una cuarta serie enfocada en la innovación y el emprendimiento médico.
El objetivo de Medu es seguir creciendo. Aunque no tienen en mente participar en rondas de inversión, Prida comenta que quieren impactar a un billón de pacientes a través de 600 mil profesionales de la salud. «Estamos ganando entre 190 y 200 nuevos usuarios al día» añade el emprendedor.