La fintech brasileña Creditas cerró sumó 200 millones de dólares en su novena ronda de financiación y anunció la compra de un banco y un prestamista hipotecario en su intento de aumentar la rentabilidad.
Ante los retos que se viven actualmente en el sector fintech, Creditas continúa con su estrategia agresiva, pues firmó un acuerdo de 100 millones de dólares para comprar la licencia bancaria brasileña de Andbank -incluyendo algunos de sus activos-, una decisión que pone a la fintech un paso más cerca de vender acciones públicamente.
Desde que se convirtió en una empresa unicornio en 2020, Creditas, con sede en Sao Paulo, ha considerado durante mucho tiempo la posibilidad de hacer una oferta pública de acciones. De ser así, el prestamista seguiría los pasos de otros grandes financieras del país como Nubank, que emitió acciones en los mercados estadounidenses en diciembre antes de que la subida de los tipos diera un vuelco brusco al sentimiento del mercado.
La tendencia de las fintech a comprar bancos no es nueva. Credijusto fue la primera empresa en comprar una licencia en México, mientras que la argentina Ualá adquirió dos prestamistas en su país de origen y en México.
A través de esta adquisición, la empresa respaldada por SoftBank podrá captar depósitos. Esta estrategia podría reducir los costes de financiación y hacer que la empresa sea más competitiva ante la desaceleración de la economía brasileña y el deterioro de los ingresos de los hogares debido a la inflación.
«[Las fintechs que compran bancos] se ha convertido en una tendencia en todo el mundo. En América Latina, esta estrategia ayuda a las fintechs a aprovechar nuevas fuentes de financiación, así como a ampliar la cartera. Creditas se está convirtiendo en una fintech muy diversa, con una creciente variedad de productos financieros y no financieros. Este proceso puede ayudar en esa dirección.»
Bruno Diniz, asesor de fintech y autor de best-sellers
La empresa, respaldada por inversores de capital riesgo como QED y Fidelity, ofrece préstamos al consumo vinculados a una garantía, como una casa. Como resultado, afirma que ofrece tasas más bajas a los brasileños.
Poder contar con depósitos bancarios podría suponer una gran diferencia. Las empresas fintech sin licencia suelen quedar dependiendo de su acceso al capital riesgo, que puede ser volátil.
Sergio Furio, CEO y fundador, dijo que la adquisición permitiría a Creditas bajar los costos de los préstamos para lograr una mayor rentabilidad.
«Los mercados de capitales están más dispuestos a fijarse en las empresas que están cerca de ser rentables o que ya lo son, por lo que aumentan las posibilidades de que se produzca una OPV antes»
Creditas se ha especializado en préstamos garantizados en Brasil, un mercado con pocos competidores fintech pero con una presencia bancaria vital. La empresa concede préstamos para automóviles o nóminas y financia reparaciones de viviendas con el activo como garantía. Ha acumulado una cartera de cerca de mil millones de dólares estadounidenses.
