Riogrande, es una startup que más que un agregador, se define como una empresa que busca crear marcas locales a través de la adquisición e incubación para la clase media emergente de consumidores en la región.
Aunque el comercio electrónico en América Latina es uno de los de más rápido crecimiento en el mundo, el mercado sigue estando muy fragmentado pues que solo los consumidores con mayores ingresos tienen la posibilidad de adquirir productos de EE.UU., mientras que 500 millones de personas con ingresos menores tienen acceso a productos más baratos y a menudo de menor calidad.
«Estamos construyendo grandes marcas locales para la clase media y la clase baja, principalmente creando nuevas marcas desde cero, pero también haciendo algunas adquisiciones en las que podemos multiplicar la marca por 30. A diferencia de los agregadores, de los que hay un par en LatAm que reúnen unas cuantas marcas con arbitraje múltiple, nosotros nos centramos en el juego del crecimiento y en cómo automatizar el proceso de crecimiento para que las empresas vean el crecimiento en un mes que otros ven en un año».
Tono Mandly
El concepto de los agregadores de comercio electrónico es bastante nuevo en América Latina, lo que representa una gran oportunidad de crecimiento impulsado en parte por el impacto de la pandemia.
Merama alcanzó una valoración de 1,200 millones de dólares, Quinio anunció la inyección de capital de 20 millones en su empresa para adquirir 30 empresas y Wonder Brands obtuvo 20 millones en inversión.
El diferenciador de Riogrande se encuentra en que busca tener un acercamiento más íntimo con quizas 30 marcas de 30 millones de dólares de ingresos al año.
Riogrande se centra en marcas como el hogar, la cocina y la belleza. Después de pasar por Y Combinator, ya ha llevado varias marcas del espacio del hogar de cero a un millón de dólares de ingresos en un lapso de dos meses.
En un inicio, la startup recibió 12 millones de dólares de financiación inicial en una ronda dirigida por Y Combinator y Wollef, con la participación de inversores individuales como Arielle Zuckerberg y Justin Mateen.
El capital adquirido se ha utilizado en la automatización de los procesos de crecimiento de la marca, la cadena de suministro y para realizar algunas adquisiciones. En las próximas semanas, la startup busca cerrar un ronda Serie A.
Riogrande ha duplicado sus ingresos en el último año por lo que ahora buscan alternar entre el crecimiento y la rentabilidad:
«Tenemos la cabeza puesta en trabajar, en seguir creciendo y en mantener las tasas de crecimiento con nuestras marcas. Los fundadores nos buscan porque no hay otros actores que tengan nuestras tasas de crecimiento».
